24.2.15

Relato "Porque tú eres bueno", de Miguel Angel de Rus

Relato aparecido en el Libro Extraña noche en Linares (M.A.R. Editor)

Mi padre tenía nueve años cuando comenzó la guerra. Qué guerra da igual. Su padre estaba en el frente, sus hermanos mayores estaban en el frente, y él, el hermano pequeño, el macho pequeño de la manada, era el encargado de buscar allí donde caían las bombas del enemigo, en las huertas abandonadas, la comida de la familia. Una lechuga, coles, patatas, un melón. No era muy difícil, se trataba de ser ágil de cuerpo y de mente; todo lo más, podían matarle. Decía una representante de la causa, mientras mi padre, niño, se jugaba la vida ante los obuses del enemigo, bendecidos por el Santo Padre católico, que es preciso que se acentúe la moral del sacrificio y el sentido de responsabilidad individual y colectiva. La moral ha de llevarnos a aceptar todas las penalidades, el racionamiento, la honradez y la austeridad, y todos nos hemos de sentir soldados de una gran causa. Y mi padre dejó de estudiar, como todos los niños, para buscar la comida que las buenas palabras de los líderes de la causa no traían. Cuando acabó la guerra, los hermanos mayores de mi padre fueron a campos de concentración, su padre fue represaliado; cuando pudieron, los hermanos fueron al exilio o a la emigración, qué más da. Al perdedor sólo le queda la diáspora o la sumisión. Y con doce años tuvo que ser el macho joven de la manada, quien buscara la comida para la manada, como si la naturaleza hubiera perdido el sentido entre los humanos.
–Cuando vayas a llegar a la estación, quinientos metros antes, acuérdate de lanzar con cuidado el aceite por la puerta del tren y te tiras tú. Lo recoges, y vienes a pie. ¿Entendido? Y que no le pase nada al aceite.
–Sí, madre.
Cómo no entenderlo. Si el policía esperaba con el arma en la estación de ferrocarril para incautarse del aceite, como si el Estado hubiera regado y abonado el olivo, como si tuviera derecho a legislar y dosificar el hambre.
Mi padre había aprendido de niño que la infancia era el período del aprendizaje, por lo que le pusieron a trabajar, con la familia repartida por Francia, Australia, Brasil, Argentina o Uruguay. Se levantaba antes que el sol, trabajaba, ayudaba en casa, y se acostaba después del sol. Año tras año. El día en que tenía una naranja era la fiesta grande del año.
–Que la vida es un valle de lágrimas, hijo.
–Sí, madre, Pero yo todo lo hago con gusto por usted.
Cada amanecer era gris, cada mediodía era gris, cada anochecer era gris. Los rostros eran tan grises como las almas. Se rezaba en los colegios, en los trabajos, en la iglesia, se fusilaba al amanecer, o se dejaba morir en las cárceles. Y mi padre, tan niño, trabajaba. Mientras los hijos de los señoritos estrenaban traje e iban al teatro, él trabajaba; mientras el hijo del rey huido tenía casa en el exilio dorado, junto a la playa, esperando que le tirasen al plato sus tajadas, él trabajaba. Tenía razones y la Ley Natural de su parte para cortarles el cuello a todos, a cualquiera, pero trabajaba.
Y llevó un luto tras otro, porque aquella era época de muertos. Por el padre, por la madre, por su juventud perdida.
Y trabajó toda su vida, sin parar. Para darnos una casa, para conseguirme una educación, para que tuviéramos las buenas ropas que los bandos en conflicto no se habían preocupado en procurarnos. Era el primero en salid del edificio y el último en volver.
Por la noche, si me levantaba, lo encontraba estudiando en el salón, recuperando lo que la guerra el había quitado. Siempre esfuerzo sobre esfuerzo. Hasta que un día, poco antes de cumplir yo los doce años, mi padre no vino a casa. Estuvo conmigo mi abuela.
–Tu madre está con tu padre en el hospital. No te habían dicho nada, pero tiene una enfermedad por lo que sólo queda rezar. Vamos a poner velas para que Dios nos vea y nos asistan los espíritus –dijo la mujeruca de negro y moño blanco, con sus creencias ancestrales y ágrafas– y vamos a rezarle a la imagen del Santo Niño del Remedio. Y a este Cristo que tus padres tienen sobre la cama. Y aquí tengo una estampita de la Virgen, que toda ayuda divina es poca.
Pasamos la noche rezando ante una fotografía de una talla que, cuando fui adulto lo descubrí, ni siquiera era la original. En el siglo XVIII le habían cortado la cabeza al niño para meterle ojos de cristal, le habían puesto pestañas postizas, se le había reconstruido el pie derecho, que había desaparecido ante tanto beso recibido de los devotos… Pero yo no tenía ni doce años, sólo sabía que quería a mi padre y si al rezar por él se salvaba, rezaría.
Recé aquella noche, sin dormir; no comí durante el día siguiente, y la nueva noche la pasé rezando enfrente del Cristo de madera, de la foto del Santo Niño del Remedio de cara triste, de la Virgen. Al amanecer, una llamada, me sobresaltó; cogió el teléfono mi abuela, por su gesto comprendí lo que había sucedido y comencé a llorar. Mientras ella hablaba, me acerqué al salón y cogí las imágenes y la talla. Fui a la cocina y con un cuchillo atravesé la cara y el cuerpo del maldito niño del remedio una docena de veces. Hice lo mismo con la imagen de la Virgen. Con toda mi fuerza infantil, puse un pie en el cuerpo del Cristo y con el otro golpeé en la cabeza hasta separarla. Cuando lo conseguí introduje os recortes de papel y la madera en unas páginas de periódico, lo impregné de alcohol de cocinar, del que aún se usaba en casa, y con unas cerillas hice la primera fogata de mi vida. Mi abuela llegó gritando y al verlo todo me señaló con el dedo y me dijo “eres un hereje, por tu culpa ha muerto tu padre, es un castigo divino”.
La bofetada la sentó en el suelo. Había muerto mi padre y aquella mujeruca quería que creyera en su dios, en sus santos de palo. Quedó con un gesto vacío, de ojos desencajados. Lo normal en ella.
Fui a la habitación de mis padres, abrí el armario y allí estaban sus trajes, sus corbatas, sus camisas. Lloraba como nunca lo había hecho. Me introduje entre aquella ropa, para sentir su olor, su compañía, su contacto, cerré los ojos y lloré de forma compulsiva. Apenas se podía respirar, pero me era indiferente.
Supongo, no lo recuerdo ya, que fui castigado severamente por aquella bofetada. Nada de los días posteriores ha quedado en mí, sólo una intensa sensación de frío, como si mi cuerpo tampoco tuviera vida. Recuerdo que mi madre compró una réplica del maldito niño del remedio inexistente y la puso en su habitación. Un día acabó en el patio interior del edificio, tres pisos más abajo. Destrozada.
A veces la escuchaba rezar con la fe del inculto. “remedia todos mis males, atiende mis peticiones, consuela todas mis penas…”
Un día fui a aquel cochambroso oratorio para la manada de la fe escondido en una callejuela. Había cartas en las que lunáticos afirmaban que el niño de los ojos de cristal les había curado el cáncer; otros dejaban piezas metálicas que pretendían ser reflejo de las partes que el niño de las pestañas les había curado. Había muñecos, pelo de pacientes de tan docto niño médico… En la puerta, un ciego vendía lotería, “que trae la suerte el Santo Niño del Remedio, oiga, que trae la suerte”. Una anciana, gibosa y de gesto contrito le daba las gracias por los milagros recibidos. Había quien pedía besarle la botita de plata que había en lugar del desaparecido pie. En aquel momento mi cerebro tuvo una iluminación y supe lo que tenía que hacer. Me arrodille histriónicamente en el suelo mugroso, en mitad de la chabola y comencé a gritar, con los brazos en alto y gesto descompuesto.
-Santísimo Niño del Remedio, yo estaba paralítico y me devolviste la fuerza en las piernas. Como si mis piernas fueran un nuevo Lázaro y tú Jesucristo, me miraste con tus ojos bondadosos y me dijiste, “levántate y anda”, y anduve. Y no sólo lograste ese milagro, también que volviera mi mujer. Tú eres la verdad.
Las viejas que pululaban por aquel antro acudieron a tocarme, como si pudieran contagiarse de mi gracia. Alguna gritó “aleluya”. Lloraban aquellos iletrados como si hubieran visto la única luz. El ciego se acercó a mí y me pasó los números de lotería por la espalda.
-Hermano, vas a bendecir estos números con tu fe. Vas a traer la fortuna con tu fe.
La gente se los compró todos en un momento. Ya que parecían haberme olvidado, me fui. Al día siguiente escuché en la radio a un docto opinador hablar del milagro acaecido en el oratorio. Habían recogido voces de la gente que juraba que yo había llegado arrastrándome y que debido a un milagro recobré la fuerza en mis piernas. Juraban que yo tenía un aura de Santidad, una luz, una energía que recorría todo mi cuerpo. Incluso una mujeruca afirmaba que me había visto levitar sobre el suelo.

-Entonces compré esa botella de armagnac, el tabaco y vine a verte a la tumba, padre. Quería contarte que el mundo sigue igual de idiota, y que algún día, pronto, nos veremos. Como ha hace calor, esta noche me quedaré a dormir sobre tu lápida, supongo que borracho, pero seguro que a ti eso no te importa. Porque tú eres bueno; no como todo ellos.
Relato íntegro en la web de Ediciones Irreverentes
http://www.edicionesirreverentes.com/relatos/7deRUS.htm 

23.2.15

HOY lunes, 23 de febrero, 19 h, en Casa del Libro de Fuencarral 119, Ediciones Irreverentes presenta 2 comedias: "Sicilia" y "Todos somos belgas"

Amante del teatro, HOY lunes, 23 de febrero, a las 19 h, en Casa del Libro de Fuencarral 119, (Madrid) Ediciones Irreverentes presenta 2 comedias de esas que te hacen salir con una sonrisa en la boca. Las comedias: Sicilia, de Julián Rodríguez Gallego, y Todos somos belgas, de Miriam Segura, Con la participación de un grupo de actores que harán lecturas dramatizadas de ambos textos, de Javier Segura, delegado diocesano de enseñanza de Getafe, y el escritor y editor Miguel Angel de Rus.Habrá risas seguras.



SICILIA, de Julián Rodríguez Gallego.
Sicilia nos ofrece un nuevo planteamiento sobre el cuento El traje nuevo del emperador, también conocido como El rey desnudo, de Hans Christian Andersen. Julián Rodríguez Gallego nos presenta a un rey cuya visión de la realidad es la propia de alguien que tiene demasiado poder y cree merecerlo todo. Entre sus merecimientos está, como es lógico, el vestuario más lujoso. Nada le parece poco si es para él. Y como sucede habitualmente con los poderosos, todos cuantos trabajan para él le dan siempre la razón, le alaban, asienten, aunque en verdad piensen que el rey ha enloquecido. Gaya, marqués y sobrino del rey; el ministro Pulido, el duque de las Salinas y el Conde de Montellano, personajes débiles y mezquinos que son expuestos y enjuiciados desde el humor y la ironía, pero también desde la compasión, para someterlo al más ingenioso de los engaños.



TODOS SOMOS BELGAS, de Miriam Segura.
Todos somos belgas es una sátira coral sobre la institución de la enseñanza, reflejada en los profesores del colegio Eddy Merckx y en sus dudosos, aunque cómicos, métodos.
¿Qué conoce el común de los mortales sobre Bélgica, además de la cerveza y el chocolate? Los protagonistas son profesores normales, gente correcta capaz de comer yogures y de entonar con orgullo y como si las sintieran frases del himno belga como "¡El cañón ha abatido al Orange, bajo el árbol de la libertad!" o "Ahogó en sangre patriota al Orange, bajo el árbol de la libertad." Hermandad ante todo.
Cuando vengan los belgas al colegio, habrá que demostrar el suficiente amor a la patria de los propietarios del centro. Y en todo caso, sea la belga o sea otra bandera, no es aconsejable limpiarse con una bandera, porque hay gente muy susceptible.



Enlaces a las obras

21.2.15

Antología de comedia y humor (Ediciones Irreverentes), se presenta el 10 de marzo en La Escalera de Jacob

Ediciones Irreverentes (Premio a la Mejor Labor Editorial 2014 de la Asociación de Autores de Teatro, AAT) presenta la Antología de comedia y humor con las obras de 27 autores teatrales más representativos de la actual creación escénica española. El acto tendrá lugar el martes 10 de marzo, a las 20.30 h, en Madrid, la sala Escalera de Jacob, con la participación de los autores y la compañía Martelache. La editorial celebra así su número 50 de la Colección de Teatro.
Dirigida por Chema Rodríguez-Calderón, Antología de comedia y humor ofrece una amplia panorámica de la comedia actual. Incluye formatos como el monólogo, el diálogo y el teatro breve pasando por todos los estilos: comedia, cabaret, parodia, stand up comedy, humor negro, teatro del absurdo, teatro político, lingüístico y erótico.
La principal intención de esta Antología es entretener, divertir y dar una visión global de nuestra mejor comedia contemporánea.
Abre la antología el texto de Félix Sabroso, tras la dedicatoria-homenaje a Dunia Ayaso. A partir de aquí son siete bloques: el primero de ellos, el bloque sexual, intencionado es poner carne, lujuria y provocación para abrir “boca”: Juan Carlos Rubio, Chema Rodríguez-Calderón, Gerard Clúa y Raul Hernández Garrido.
El segundo con dos obras que tienen sentido y autonomía propios: Alfredo Sanzol y Secun de la Rosa.
Extenso el tercero con una muestra variada de monólogos con voz de hombre y mujer, incluso algún objeto: Antonio Zancada, Pilar Zapata, Concha Rodríguez, Jesús Campos, Ester González Escobar, Mariam Budia, José Luis Alonso de Santos, Diana de Paco y Maria Juan.
El cuarto para la obra de teatro breve: José Ignacio Tofé, Álvaro Parrilla Álvarez y Eva Redondo.
El quinto grupo de textos, para los más irreverentes: Javi J. Palo, Miguel Ángel de Rus, Juana Escabias y Juan García Larrondo.
En el sexto el único texto dramático, no por eso exento de comedia: Carmen Soler.
El séptimo y último para el humor más blanco: Carlos Álvarez Méndez, Jacinto Bobo y Manuel Cortés Blanco.
La presentación de la Antología de comedia y humor será el martes 10 de marzo, a las 20.30 h, en la sala Escalera de Jacob, C/ Lavapiés, 9, esquina con C/ del Olmo. Metro Lavapiés y Tirso de Molina.
El evento será dirigido por Chema Rodríguez-Calderón y Gerard Clúa. Se hará una selección de textos representados por la compañía Martelache. Será un espectáculo de una hora en la que podrá conocerse partes representativas de los monólogos reunidos.
Si quieres conocer la Colección de Teatro de Ediciones Irreverentes, está en http://www.edicionesirreverentes.com/Teatro.htm
Información sobre el Premio A la Mejor Labor Editorial de Ediciones Irreverentes http://www.edicionesirreverentes.com/newReportajes/reportajes/ediciones_irreverentes_mejor_labor_editorial.html
Y los actos continuados de Teatro de Irreverentes por España y el extranjero, bajo el epígrafe MES DE TALÍA en http://www.edicionesirreverentes.com/newReportajes/reportajes/MES_TALIA.html

18.2.15

Presentación de Jubiloflautas, de Manolo Royo, y chocolate posterior


Anoche Ediciones Irreverentes celebró la presentación de la comedia Jubiloflautas, de Manolo Royo, en la Casa del Libro de Fuencarral 119, con la participación del actor Pepe Ruiz, el escritor y Editor Miguel Angel de Rus, y el autor. Se habló de PODEMOS, la crisis, la casta, Julio Anguita, Pablo Iglesias, y sobre todo, se rió mucho durante la hora que duró el acto.
Y después nos fuimos en tropel a tomar chocolate con picatostes a los sótanos de Viena. En las fotos, además del autor, Manolo Royo, los actores Pepe Ruiz y Pepe Carabias, los autores Santiago Bergantinhos y Miguel Angel de Rus, la editora de Irreverentes Vera Kukharava, la productora de la obra y el director del Teatro Quevedo.



 Y en la última fotografía, el chocolate con picatostes.

16.2.15

Entrevista al humorista Manolo Royo, por su comedia Jubiloflautas




P.- ¿Arreglarán tus jubilados revolucionarios el mundo desde su mesa de café?
R.- Tratar de arreglar el mundo en un par de tertulias de café, es tan típico como lo de recetar al vecino. Lamentablemente, el El mundo se arregla con la administración correcta de los bienes y la aplicación estricta del sentido común. Me pregunta si se puede enfocar desde el humor la terrible crisis que estamos sufriendo. Creo que se debe, por lo menos nos reiremos un poco y con el distanciamiento, algo aprenderemos sobre nuestros males. Creo que mi comedia es válida porque recuerda a los políticos que si tratas mal a quien sirves, pronto le servirá otro. Por eso ahora hay tanto miedo cuando se mira a Grecia, porque todos se han dado cuentas que quien se encarga de trabajar para nosotros, puede ser otro".

P.- ¿Representas en Jubiloflautas las dos España?
R.- No hay sólo dos Españas, ahora parece que -como los panes y los peces- se han multiplicado y han pasado a ser las diecisiete españas, cada una con sus gobiernos, sus banderas, su corrupción, sus ciudadanos… En mi obra presento a un prejubilado revolucionario moderado, y a otro más moderado, pero con buena fe. Aspiran a arreglar un país que entre todos hemos dejado desarreglar.

P.- ¿Es Jubiloflautas una obra Irreverente?
R.- No, es sólo un reflejo social, la sociedad es la que se pone irreverente a la fuerza, la que se manifiesta, la que protesta y saca las cacerolas a la calle porque están hartos de considerarse engañados. Yo lo cuento en mi obra y procuro que el lector o el espectador, primero sonría, y después medite.

P.- Hecha con un planteamiento escénico muy moderno
R.- Esta es una obra escrita para ser representada entre el público. Ya que la acción de la obra se desarrolla en un bar. Sería magnífico que no hubiera escenario como tal, sino que todo el teatro reprodujera un bar, con sus mesas, sus sillas, sus consumidores... Ya he pensado en vender butacas de platea y butacas de escenario para darle al público la posibilidad de acompañar a los actores. La idea al escribir la obra es que tres actores estén en el escenario rodeados por parte del público, que será la gente que hay en el bar. Y al cambiar de acto, se cambiaría el público que iría al escenario

P.- ¿Hay políticos en España que pudieran representar tu obra?
R.- Julio Anguita podría muy bien ser uno de los dos protagonistas. Es más, le vendría el papel como anillo al dedo, por la edad, por su gran capacidad intelectual y conocimientos y por su cordura. A Pablo Iglesias, aunque es un chico muy preparado, por el aspecto y la edad, sélo le quedaría el papel de camarero. Hay que tener en cuenta de que los tres personajes dos tienen alrededor de 60 años.

P.- ¿Tu obra va a sorprender a quienes te han visto haciendo en TVE de mañico o de niño?
R.-Sí que se sorprenderá al espectador. Siempre lo descoloco en mis actuaciones en directo, y en este caso, le vamos a romper los esquemas, porque lo que se dice es lo que se decía en la Puerta del Sol, porque las ropas son las que llevaba la gente, porque cuando se represente, van a estar como en una asamblea, todos reunidos, porque la gente piensa que va a escuchar chistes, pero va a vivir el humor y luego a quedarse pensando. Creo que le va a interesar especialmente a público joven, a los que estaban y siguen estando en asambleas. Y a los jubiloflautas que represento en mi obra, que hay muchísimos. El espectador te encasilla y yo me desencasillo de forma habitual, constante y en ocasiones convulsivas. Es la única forma de sobrevivir tantas décadas en el mundo del espectáculo.

P.- Además de esta obra de teatro, qué estás haciendo.
R.- Hago 30.000 kilómetros al año de pueblo en pueblo que es donde me gusta actuar, cara al público. No formo parte de ninguna plantilla de ninguna televisión. El tiempo libre lo dedico a crear en otras artes, eso me realiza aún más como ser humano y como individuo.

Más información en 


9.2.15

Mañana, martes, 11 de febrero, a las 19,30 h, Ediciones Irreverentes presenta la antología de relatos eróticos VOYEUR en la casa del libro de Fuencarral 119

Mañana, martes, 11 de febrero, a las 19,30h, Ediciones Irreverentes presenta la antología de relatos eróticos VOYEUR en la casa del libro de Fuencarral 119, una antología de escritores de primera línea centrados en mirones y exhibicionistas.
Hay relatos de Antonio Gómez Rufo, Pedro Antonio Curto, Carol Sánchez Molero, Félix Díaz, Abel Bri, Juan Guerrero Sánchez, Rosi Serrano Romero, Sara García-Perate y Miguel Angel de Rus. Junto a ellos,  autores clásicos como Pierre de Bourdielle, Charles Derennes, Henri Barbusse, Felipe Trigo o Pierre Louÿs.
Ediciones Irreverentes ha reunido 240 páginas de alta intensidad literaria y erótica en http://www.edicionesirreverentes.com/incontinent…/Voyeur.htm

Os esperamos. Recuerda: mañana, martes, 11de febrero, a las 19,30h, Ediciones Irreverentes presenta la antología de relatos eróticos VOYEUR en la casa del libro de Fuencarral 119

8.2.15

Antología de relato erótico VOYEUR

Ediciones Irreverentes ha publicado una antología de relatos eróticos inspirada en voyeurs y exihibicionistas que calentará a todos sus lectores.
     Vivimos en la época más Voyeur de la historia de la humanidad. El desnudo se nos presenta allá donde miremos, en Internet, en las playas, en el arte, en las fiestas, en las zonas turísticas low cost. Mujeres desnudas se ofrecen en directo a través de la cámara del ordenador de sus casas; las páginas web más visitadas están repletas de fotos de chicas desnudas y millones de hombres las contemplan desde su soledad, desde su oscuridad. Y eso es para siempre, porque ahora las imágenes ya no mueren, están condenadas a circular eternamente por Internet. Nunca el Voyeur tuvo tanto placer al alcance de su mano.
Ante el cambio en la percepción del Voyeur, se planteó el nacimiento de este libro, en el que se recogen relatos de autores clásicos como Pierre de Bourdielle, Charles Derennes, Henri Barbusse, Felipe Trigo o Pierre Louÿs. Junto a ellos hay destacados autores contemporáneos de España, Venezuela y Colombia, como Antonio Gómez Rufo, Pedro Antonio Curto, Anunciada Fernández de Córdova, Carolina Sánchez Molero, Félix Díaz González, Abel Bri, Álvaro Díaz Escobedo, Juan Guerrero Sánchez, Rosa Serrano, Pablo Solares Villar, Nelson Verástegui, Sara García Perate, Francisco José Segovia Ramos, Manuel A. Gala de Río, Luis Soler Dauchy y Miguel Ángel de Rus que muestran diversas formas de entender este tipo de placer solitario, desde las más elevadas hasta las más libertinas. Exhibicionistas y voyeurs se dan cita en playas, ventanas, áticos, cámaras de fotos, trenes, calles, jardines, incluso en el cementerio de Père Lachaise o en la presencia efímera de una imagen de televisión.
En la actualidad, ha muchas webs especializadas en erotismo que tienen su apartado para relatos eróticos en el que sucede lo mismo, sean webs en español, inglés o francés; los relatos voyeurs se presentan casi siempre como experiencias propias: chicas que muestran sus senos en la playa por primera vez, novios que disfrutan al ver a su novia desnuda entre sus amigos, incluso hombres que tras años de matrimonio necesitan mostrar desnudas a sus esposas para reavivar la pasión. El Voyeur disfruta de la visión chica que se desnuda en público por primera vez o de la visión de la mujer madura, pero en no pocas ocasiones, esa contemplación va más allá. El lugar preferido de la mujer para ser vista desnuda es la playa, lugar que suele estar repleto de gente, por lo que la exhibición puede ser controlada. Es difícil que el hombre se acerque a ella con testigos, y si se acerca, puede ser fácilmente rechazado. Así puede mostrarse sin miedo. Y en esa promiscuidad multitudinaria, el tímido es feliz; contempla cuerpos desnudos sin compromisos, sin miedo al rechazo. Todas se le ofrecen y puede gozar de su fantasía. La playa es el burdel de otras épocas, el lugar en que acceder al cuerpo de la mujer, sea joven y adulta, soltera o casada, todas ellas son contempladas en su desnudez y gozadas por el observador. Es en esta época de exhibiciones y contemplaciones, en la que la literatura voyeur se expande más que nunca. Mujeres desnudas se ofrecen desnudas a través de la cámara del ordenador de sus casa, millones de hombres las contemplan desde su soledad, desde su oscuridad. Y eso es para siempre, porque ahora las imágenes ya no mueren, están condenadas a circular eternamente por Internet. Nunca el Voyeur tuvo tanto placer al alcance de su mano.
Ante el cambio en la percepción del Voyeur, se planteó el nacimiento de este libro, en el que se recogen diversas formas de entender la contemplación gozosa a través de los tiempos.

Los relatos y las elegantes imágenes del interior incitan al lector a retener la mirada en cada página.
Toda la información sobre el libro en la web de Ediciones Irreverentes  http://www.edicionesirreverentes.com/incontinentes/Voyeur.htm
Puedes comprar el libro con total discreción en la librería electrónica  http://www.edicionesirreverenteslibreria.com/epages/ea9759.sf/es_ES/?ObjectPath=/Shops/ea9759/Products/2013

5.2.15

Presentación en BURMA de la novela negra "La verdadera historia de Gloria T" del francés Pascal Buniet (M.A.R. Editor)

Mañana viernes, 6 de febrero a las 19:30 horas, M.A.R. Editor​ presenta la novela negra "La verdadera historia de Gloria T" del francés Pascal Buniet​, en la Librería Burma, de Madrid. C. Ave María 18 (Metro Lavapies) El autor estará acompañado por el escritor y editor Miguel Angel de Rus​
            INFORMACIÓN DEL LIBRO: El hijo de la todopoderosa empresaria Gloria T. ha desaparecido sin razón aparente, igual que desapareció veinte años antes su marido, el alemán Wolfgang Brunsman. Pero todo ha cambiado en aquella tierra que había pasado de ser un tranquilo pueblo de pescadores en la isla de Tenerife a una floreciente zona turística con muchos intereses ocultos. El repaso a la vida de Gloria T. mujer de origen muy humilde, cuya prosperidad ha aumentado en paralelo al boom urbanístico del sur de la isla de Tenerife, nos permitirá entrar en el proceso de esclarecimiento de ambas desapariciones.
El eje central de La verdadera historia de Gloria T. es la ambición desmedida en el mundo artificial de las zonas turísticas, con personajes que han huido de la pobreza de la agricultura, aristócratas arruinados que quieren recuperar su antiguo status, estafadores, hombres buenos pero débiles, mujeres fuertes y poderosas que temen sobre todo volver a la pobreza. Y dos desapariciones sin sentido aparente.
Así describe el autor la realidad de esta mujer: “La novela se desarrolla en una época de grandes cambios, económicos y sociales en el sur turístico de Tenerife. De repente la agricultura pasó a un segundo plano y los terrenos áridos de la costa se transformaron en minas de oro para sus propietarios. La vida de Gloria sigue ese mismo patrón. Ella es a la vez producto y protagonista de esa transformación. Es una luchadora que se adentra en una espiral que la llevara a la cima con la sola fuerza de su ambición. Mira hacia adelante, siempre. El éxito económico es su meta. Nada la puede parar. La pregunta es si el triunfo como el de Gloria está reñido con la felicidad personal. La novela es reflejo de una época y creo que muchos lectores se van a reencontrar en ello.”
Todo puede tener sentido si creemos en lo que dice el primer párrafo de esta novela: Wolfgang tardó muchos años antes de tener el valor de recordar con serenidad el día en que murió. Lo que ocurrió aquel día fue peor que una muerte porque no se encontró ningún cadáver. Desapareció físicamente y todo lo que caracteriza el estado mental de una persona con vida se esfumó, se borró como se puede borrar el disco duro de un ordenador.
El autor, afincado en Canarias, habla así de su vida en las islas “Tengo la suerte de vivir en el sur de Tenerife junto a una zona natural protegida llamada Malpais de Rasca. La noche del ocho al nueve de enero 2004 llego una patera a esta costa, inhóspita para las embarcaciones. Todo cuanto describe John, el protagonista, en las quince primeras páginas de la novela, lo viví personalmente. Me encontré con los restos del desembarque de inmigrantes en este lugar, es decir ropa, enseres, zapatos abandonados… por la prisa y nocturnidad. Recientemente descubrí con sorpresa que la realidad sobrepasó mi ficción. Un conocido de la zona me pregunto de qué trataba el libro. Se lo dije y me respondió "Claro que me acuerdo, nosotros escondimos a tres de esos inmigrantes." Casi todos los personajes de la novela son gente que se han desplazado a vivir a otros países. Pero la novela pone el acento en lo que llamaría "la emigración dolorosa" que consiste en arrancarse a su tierra como única forma de escapar a la miseria. Cuando yo llegué a Tenerife hace unos treinta años, regresaban canarios que habían emigrado a Venezuela y cuyo dinero ganado con sufrimiento, y traído a la isla, ha dejado a hijos y nietos en situaciones económicas muy buenas. Es importante que estos jóvenes se acuerden de dónde viene su bienestar y no traten con desprecio a los que a su vez llegan en busca de lo mismo.”

            EL AUTOR: PASCAL BUNIET (Saint-Pol-sur-Mer, Francia, 1952)

Licenciado en filología inglesa por la Universidad de Lille, Francia. Vivió dos años en Irlanda, trabajó un año en el departamento de francés de la Universidad de Galway. En 1979 se traslada a Tenerife donde reside desde entonces. Es autor de la novela Lágrimas en el mar, publicada por editorial Alhulia en 2009, obra publicada en Francia con el titulo de Des larmes d'espoir, en 2014. La verdadera historia de Gloria T. es su segunda novela. Toda la información en http://www.mareditor.com/narrativa/Pascal_Buniet.htm